El feng shui es una conocida filosofía de origen oriental enfocada en buscar en equilibrio energético dentro del hogar, a través de la organización y acomodo de los muebles, o de la adición de objetos como espejos.
Sin embargo, esta práctica no solo está basada en cosas materiales, sino también en los gatos domésticos, que han estado presentes en estas tradiciones bajo la creencia de que son portadores de buena fortuna.
Esto se debe a que estas mascotas son excelentes para el buen flujo del chi, una energía y fuerza vital que de acuerdo con el feng shui rige todo el universo y lo que hay en él; es por esto que tener uno en casa es tan positivo.
Los animales son excelentes dinamizadores del chi, la energía que rige todo el universo. Por lo tanto, un gato puede activar esta fuerza vital y, en definitiva, ayudar al bienestar general del hogar y, por supuesto, al de las personas que vivimos en él.
Pero no basta tan solo con tener una de estas mascotas en casa, también hay que asegurarnos de que sea feliz y viva cómodamente, pues así como existen energías positivas, también las hay negativas.
Para lograr esto, los consejos son los mismos que te daría un veterinario: una buena alimentación, higiene y una excelente salud.
También es necesario que le demos al felino un lugar donde se sienta a gusto, y pueda relajarse u ocultarse, y de acuerdo con la creencia, esto solo sucederá en sitios donde detecte vibras positivas.
Si pasa demasiado tiempo en algún lugar, esto también quiere decir que está intentando limpiar la zona de energías negativas.