La bóveda del fin del mundo.
Se encuentra, en el archipiélago Noruego, cerca del polo norte, ahí se guardan más de un millón de muestras de semillas.
La instalación se encuentra a unos 130 metros de profundidad en una montaña de piedra arenisca, a una altura a la que no quedaría cubierta por agua incluso si se deshiciera todo el hielo del planeta, es impenetrable a la actividad volcánica, los terremotos y la radiación, entre otros, y se mantienen las semillas a -18° de forma permanente.
En dichas instalaciones, existen 135.000 variedades de cultivos de trigo, granos de haba, lentejas, garbanzo y la colección de cebada más valiosa del mundo, para una posible devastación o fin del mundo.